1 - Le droit Chemin
Nos trae Lupano una buena, realista, tierna, simpática, historia rural en la Francia de entreguerras, con una grupete de chavalillos ante esos momentos, esas tardes, en las que la juventud va llegando a su final, ante la experimentación de nuevas vivencias y deseos.
El dibujo de Tanco (Morgaan) , pese a parecer pelín frío, cumple su cometido, para una historia cerrada que se guarda alguna sorpresa en la manga. Sorpresa que la hace crecer, ser más madura. Además algunos secundarios son verdaderamente buenos, lo que redondea el conjunto, recomendable.
2 - Solo los encontramos cuando están muertos, vol. 1
Titulazo, portadaca, regular me ha dejado este. Por un lado la historia, que suena a vista conforme pasas páginas, no me ha acabado de llenar, aunque tampoco me ha disgustado.
Por otra parte el arte me ha resultado flojo, confuso, hasta incómodo en algunas viñetas. No por lo narrativo, que no es malo, sino por lo indefinido de muchos momentos, que contrastan además con otros más nítidos, buenos. Sin saber de esto del arte más que desde la opinión de un triste aficionado, le falta lápiz y tintas concretas y le sobran ordenador y filtros de color. En mi opinión, insisto.
Sin ser mal tebeo, ojo, me lo leí con ganas, con interés, no creo que siga esta serie.
3 - El incidente Darwin, vol. 1
Este es un tebeazo.
Original propuesta (en parte) , bien dibujada en todo momento,en base a argumentos que dan pié a debate, sobre planteamientos diversos e ideologías diferentes del reparto.
Directo, con ritmo y acción además de conceptos filosóficos o de actitud vital, sembrando mientras tanto con acierto para próximas entregas, que no deberían ser demasiadas por el propio bien de la obra.
Un seinen para disfrutar, en definitiva, deja con ganas de más.
4 - Juez Bao, vol. 1
Este es curioso, sabe a viejo, y a la vez, tras leerlo, es moderno en parte.
Un misterio, un todopoderoso investigador y amigos, en una ambientación medieval oriental, rollo Agatha Christie salvando las distancias, todo clásico a más no poder. Una edición estupenda para una preciosidad de viñetas, podría ser de hace 300 años o de mañana, o una fotonovela, o un álbum homenaje, o una adaptación.
Lo bueno permanece, para el que guste y deguste. Raro, con lo bueno de serlo.
5 - Wollodrin, vol. 1
Este me ha gustado, lo que era de esperar vistos autores y temática, pero me ha gustado más de lo esperado, mucho.
Pensaba que iba a ser más moña, más de humor chorra, pero que va, es una lectura pensada para público adulto, fan, sí, pero fan mayorcito, leido. Y risas pocas, fallo mío.
No inventan nada Chauvel y Lecureley, pero el que es bueno, es bueno. Y estos lo son. Quiero más.
6 - La maldición del petróleo.
Esclarecedor. Debería ser lectura obligatoria.
La mitad te lo sabes, o te lo imaginas. O incluso bastante más de la mitad. Tanto esta parte, como el resto, te lo confirman en estas páginas. O te enseñan sobre lo que no conocías, que es aún peor.
Pese a un dibujo perezoso, que funciona aún siendo curioso, mejorable, y pese a predicar para confesos, este álbum es un documental soberbio, de nota. Obra de biblioteca.
7 - ISS Snipers, vol. 1
Una de esas obras, da igual el medio, a las que mola hincar el diente de vez en cuando, y pasar un rato entretenido con algo que dá lo que promete, ni más ni menos.
Muerte y destrucción, disparos infinitos, luchas a caraperro, o caralobo. Tecnología imposible, héroes y villanos en el espacio y sus planetas, naves o asteroides, intereses ocultos, matices pocos.
El que quiera profundidad que se ponga una de submarinos, o una iraní, esto es Syfy y sus fuegos artificiales.
8 - Reckless, vol. 1
Si alguien ve a Brubaker y Phillips por la calle, haciendo algo que no séa su siguiente cómic, que les coja y se los lleve a la mesa de trabajo, que no dejen de producir. Se merecen esa esclavitud, y sino, que no séan tan, tan, tan buenos, una y otra vez.
Y me da igual si esta obra suya es mejor que aquella otra obra suya, o peor que la anterior, o que la futura, hagan lo que hagan es una lectura obligatoria, más o menos densa, más o menos negra, pero siempre cojonuda.
Esta en concreto, con el rollete perdedor yanki profundo, me ha gustado mucho, mucho, lo cuál no es ninguna sorpresa, no tenía ninguna duda, como no la tengo sobre que el volumen dos, que tengo aquí al lado, me gustará.
Y que sigan.